Los habitantes de Gaia
Sobre los habitantes de Gaia
La naturaleza como ser vivo nos observa, se desvela y nos desvela, se descubre y nos descubre, nos penetra, nos abraza, nos sobrecoge, nos calma y también nos inquieta, nos recuerda quienes somos, abriéndonos a dimensiones y relaciones nuevas, inexistentes en nuestra rutina diaria, en nuestro vertiginoso rítmo vital. La Naturaleza nos sana.
Los seres de la naturaleza, los habitantes de Gaia, tan sólo se muestran con una mirada lenta y atenta. Seres del aire, de la tierra, del agua, del fuego, de los bosques, seres del universo, cada uno con su personalidad, ofreciendo unas cualidades y una función específicas, un diálogo único.
Aunque en el año 2007 comienzo a realizar simetrías con fotos de la naturaleza, teniendo así un primer contacto con los seres que se asomaban llamando mi atención, Los habitantes de Gaia empezaron a presentarse con rotundidad, fuerza y claridad en el año 2012, no dejando desde entonces de aparecer nuevos rostros. Ellos han cambiado mi manera de mirar, de estar y de relacionarme con la naturaleza. No dejan de enseñarme, de mostrarme posibilidades de construir una nueva vida en mí, en los que me rodean, en lo que me rodea. A través de ellos he tomado consciencia de muchos de los límites y prejuicios con los que vivía y me han hecho ser un poco mejor. Me he dado cuenta de los movimientos internos en los que transito cada día de forma rutinaria y me han impulsado a abandonarlos expandiendo y abriendo otras posibilidades de existencia posibles.
Estas imágenes no se construyen mentalmente, sino que aparecen, surgen como una nueva familia que ya me acompaña desde hace tres años. La fotografía es el medio que utilizo para captar en la naturaleza ese instante, que fluye desde una previa conexión amorosa e íntima con el lugar. De este modo, lo que presiento y percibo se hace visible cuando elaboro esa imagen, poniéndola frente a un espejo, doblándola para permitir que este reflejo me traiga el ser que desea mostrarse, a modo de palíndromo visual. A partir del momento mágico de su desvelamiento se inicia todo un proceso diferente con cada uno de ellos.
Al principio de este proceso, en el año 2012, las imágenes eran estáticas pero con el tiempo comenzaron a mostrarse en movimiento, de tal manera que me era imposible concentrar en una sola imagen toda la información percibida. Así fue como surgieron las videoanimaciones. A través de ellas podemos intuir y conocer mucho más la personalidad, el carácter y el mensaje de estos habitantes de Gaia.
Con estas imágenes me gustaría facilitar la apertura a la comprensión de una nueva manera de mirar la naturaleza, de estar en el mundo y vincularnos con ella , de interactuar con el espacio vital que se nos ha regalado y nos espera, nos nutre, siempre generoso.